"Un acercamiento al síndrome de asperger. Una guía teórica y
práctica"
Muchas de las características definitorias del Síndrome
Asperger se hacen más complejas al llegar a la adolescencia. Además, el
panorama se complica si tenemos en cuenta que algunas de las dificultades de
estas personas son más fáciles de manejar en la infancia. Durante la adolescencia,
las características y cambios típicos de esta edad llevan, en la mayoría de los
casos, a un mayor sentimiento de soledad, incomprensión y deseo frustrado de
pertenecer a un grupo. Las últimas investigaciones han demostrado que a partir
de la adolescencia el riesgo de padecer alteraciones psicológicas como
depresión, ansiedad u obsesiones aumenta notablemente en las personas con Síndrome
Asperger.
Para ellas, la adolescencia es una época especialmente
difícil, ya que en ese momento experimentan un mayor deseo de relación y
necesidad de formar parte de un grupo, junto con una clara conciencia de las
diferencias entre ellos y los otros chicos de su edad.
Además, los cambios físicos que conlleva la adolescencia
suelen confundir mucho a estas personas. Durante este periodo, los chicos con
Síndrome Asperger se pueden mostrar excesivamente sensibles a las críticas
y a las burlas de sus compañeros. Aunque los cambios físicos se producen a la
misma edad que en el resto de los adolescentes, los cambios emocionales suelen
mostrar cierto retraso; así, mientras que sus compañeros ya hablan de novias o
de saltarse las reglas, ellos continúan queriendo sólo una amistad y muestran
fuertes valores morales. A pesar de ello, y como veremos más adelante, la adolescencia
también trae consigo una mayor comprensión de las distintas situaciones
sociales, mayor capacidad de reflexionar sobre distintos eventos y sobre uno
mismo y mayor motivación hacia el aprendizaje y la superación de las
propias limitaciones. Aunque los problemas a los que se tiene que enfrentar un
adolescente con Síndrome Asperger son, en cierto sentido, diferentes a los
que hemos señalado en la infancia, en esta nueva etapa del ciclo vital el
adolescente continúa presentando las mayores dificultades en las áreas de
relación social, comunicación, flexibilidad y coordinación motora. Junto a
éstas, resumimos en el siguiente listado los principales problemas que suelen
aparecer cuando las personas con Síndrome Asperger llegan a la adolescencia.
a) Principales dificultades en la adolescencia
• Presencia de inmadurez en el plano emocional.
• Presencia de reacciones emocionales desproporcionadas y
poco ajustadas a la situación.
• Intereses inmaduros y poco acordes con la edad (por
ejemplo determinados dibujos animados, personajes de programas infantiles,
etc.).
• Mayor conciencia de diferencia y de soledad.
• Sentimientos de incomprensión y soledad.
• Mayor vulnerabilidad a alteraciones psicológicas como la
depresión, la ansiedad y el estrés.
• Descuido de la higiene y el cuidado personal.Muchos
adolescentes con SA se muestran poco consistentes en aspectos relacionados con
la higiene personal, por ejemplo, se niegan a ducharse diariamente, descuidan
su aspecto físico, rechazan utilizar desodorante o colonia y prestan poca
atención a la higiene bucal. Esa tendencia a descuidar la imagen personal y la
propia higiene que muestran muchos adolescentes también va a favorecer su
aislamiento y fracaso a la hora de encontrar un grupo de referencia con el que
poder interactuar. A pesar de ello, es importante señalar que en algunos casos
ocurre lo contrario, llegando incluso a desarrollar rituales obsesivos en
relación con la higiene (por ejemplo, el lavado obsesivo de manos).
• Desinterés hacia las modas y la imagen personal.
• Aumento de las obsesiones y los rituales de pensamiento.
Los rituales simples de conducta y el interés obsesivo hacia determinados temas
típicos de los niños con SA, suelen dar paso a verdaderas obsesiones y rituales
de pensamiento durante la adolescencia. No es extraño que muchos adolescentes reciban,
en esta etapa de la vida, un diagnóstico adicional de Trastorno Obsesivo
Compulsivo y que requieran un tratamiento farmacológico adecuado a esa nueva
condición.
• Dificultades académicas. El rendimiento escolar en los
cursos superiores se ve dificultado por:
- La lentitud al coger apuntes.
- Las dificultades para adaptarse a los frecuentes cambios
de profesores, aulas, horarios, etc.
- Torpeza a la hora de elaborar planes de estudios y
secuenciar sus tareas.
- Desmotivación hacia determinadas asignaturas.
- Dificultades para captar la idea principal de un texto y
para seleccionar la información más relevante.
Es importante señalar que este panorama puede cambiar al
llegar a la universidad. Los chicos con SA que logran acceder a una carrera
universitaria suelen mostrar buenos resultados académicos. Esto se debe en
parte a que aumenta notablemente la motivación hacia el estudio (lo normal es
que elijan carreras relacionadas con sus temas de interés) y a que no sienten
tantas presiones sociales (el ambiente universitario facilita el “pasar
desapercibido”).
b) Cualidades y aspectos positivos de los adolescentes con
Síndrome de Asperger
Junto a las dificultades anteriormente descritas, es
importante destacar también los aspectos positivos que aparecen con la llegada
de la adolescencia. Aparte de los puntos fuertes ya comentados como la
excelente memoria, la presencia de habilidades especiales en áreas concretas,
el dominio de un rico vocabulario o el perfeccionismo, cabe destacar las
siguientes características positivas:
• Presencia de fuertes valores morales. Los adolescentes con
SA suelen mostrar altos valores de lealtad, sinceridad, compañerismo y bondad,
lo que les convierte en personas excepcionales y honestas, defensores a
ultranza de los derechos humanos y fuertes críticos de las injusticias que
observan a su alrededor.
• Persistencia para alcanzar sus metas y objetivos.
• Gran deseo de superación.
• Personalidad sencilla, ingenua y “transparente
• Ausencia de malicia y de “dobles intenciones”.
• Mejor dominio de las reglas sociales básicas. Al llegar a
la adolescencia, muchos chicos con SA, sobre todo si han recibido un
tratamiento adecuado durante la infancia, han interiorizado y aprendido algunas
reglas sociales básicas, lo que les permite desenvolverse con mayor soltura y
éxito en situaciones de interacción social breves y “superficiales”. Muchos
adolescentes comentan que no muestran especiales dificultades a la hora de
conocer a una persona y mantener una breve conversación con ella; sin embargo señalan
que los problemas siguen apareciendo cuando se trata de intimar con esa persona
o mantener una relación más cercana y profunda.
c) Necesidades en la adolescencia
En los ciclos de educación secundaria y superior es
importante tener en cuenta una serie de estrategias útiles que pueden facilitar
tanto el éxito académico del chico con SA como su integración social en su
grupo de referencia, disminuyendo de esta manera el absentismo escolar, la
desmotivación y el malestar que suelen expresar muchos de estos adolescentes
cuando llegan a cursos superiores.
Para facilitar la adaptación a las nuevas exigencias
académicas y sociales es aconsejable tener en cuenta las siguientes orientaciones
educativas centradas en el ámbito escolar:
• Educar a los compañeros en la tolerancia, respeto y
comprensión hacia el chico con SA, describiendo las características del cuadro
y haciendo especial hincapié en la limitación en habilidades sociales.
• Enfatizar las habilidades académicas sobresalientes del
chico con SA, mediante situaciones de aprendizaje cooperativo en las cuales sus
habilidades de lectura, vocabulario, memoria, almacenamiento de información,
etc. sean consideradas como algo valioso por sus compañeros y fomenten su
aceptación.
• Motivarles a participar en situaciones que refuercen su
autoestima, mejoren su imagen de cara a los demás y faciliten la integración en
el grupo.
• Intentar asignarles algunas tareas académicas en las que
se puedan incluir sus temas de interés.
• Proporcionarles adaptaciones no tanto de contenido como de
metodología (más tiempo para terminar sus tareas y exámenes, posibilidad de
exámenes orales, utilización de un ordenador con procesador de texto, potenciar
la vía visual de aprendizaje, empleo de preguntas cerradas en los exámenes como
los test de respuestas múltiples, tiempo extra para pasar a limpio los
escritos, etc.).
• Proporcionar directrices claras sobre la manera de
presentar los trabajos.
• Contar con la figura de un tutor o profesor de “apoyo” que
esté pendiente del estado emocional del chico y que pueda tener reuniones
periódicas con él para hablar sobre su situación personal, académica,
emocional. Este tutor además debería:
1. Elaborar planes de estudio
2. Planificar y controlar técnicas que le permitan hacer
frente a situaciones difíciles que se le puedan plantear en el ambiente
escolar.
3. Motivarle a alcanzar metas y ayudarle a percibirlas como
alcanzables si se plantean estrategias adecuadas.
4. Ofrecer orientación laboral y profesional.
• Incluir al chico/a en un programa de educación física
orientado hacia la salud y la buena forma física, y no en un programa de
deportes competitivos.
• Analizar las posibles reacciones disruptivas del chico/a
antes de asumir culpas o atribuir determinadas intenciones. Las verdaderas
razones que subyacen a un determinado comportamiento, pueden no ser tan claras,
y la adopción de medidas drásticas, como castigos, pueden empeorar la situación
ya que ante ellos, el chico/a se puede sentir injustamente tratado y
desmotivado a cambiar su comportamiento.
• Preparar al chico/a con SA para el paso a la universidad o
al mundo laboral. Es muy importante planificar, anticipar y prepararle para ese
cambio, que generalmente provoca altos niveles de ansiedad y miedo. Durante el
último curso de bachillerato se deben planificar visitas al campus
universitario, asistir a algunas clases de oyente, coger apuntes, bajar a la
cafetería, visitar la biblioteca, etc. para eliminar la imagen negativa que
suelen desarrollar del ambiente universitario, aumentar la motivación a
terminar sus estudios de bachillerato y poder comenzar a elaborar un plan
de futuro.
• Fomentar la participación en actividades extracurriculares
relacionadas con los puntos fuertes e intereses del chico/a. Estos grupos le
brindarán otra oportunidad estructurada para interactuar con sus compañeros.
Aparte de estas estrategias descritas en el apartado de
estrategias generales de tratamiento, durante la adolescencia, los chicos y
chicas con SA necesitan:
- Conocer y aceptar lo que significa el “Síndrome de
Asperger”. Existen programas específicos, como el de Peter Vermeulen (1999) en
los que se recogen los pasos a seguir para comunicar a los chicos su
diagnóstico.
- Reconocer lo bueno y malo de uno mismo.
- Desarrollar estrategias de autocontrol (técnicas de
relajación, inoculación de estrés, técnicas para aliviar o controlar la
ansiedad, desensibilización de posibles fobias, etc).
- Adquirir un autoconcepto positivo y realista. – Seguir
programas específicos de enseñanza de técnicas de control de pensamientos
obsesivos y preguntas repetitivas.
- Recibir apoyo orientado a mejorar las habilidades sociales
y conversacionales.
Imagen: Graciela Rodo Boulanger
4 comentarios:
Me encantó!! Saludos
¡Qué artículo más bien explicado, Carmen!
Muchas gracias por compartirlo con nosotros. A mí, como a Silvia, también me ha encantado :D.
Un abrazo :).
Gracias Silvi! un abrazo
Te gustó? Nadie mejor que vos para saber si es bueno o no. Todo lo que subiste al blog también son excelentes y útiles. Gracias. Cariños
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